Idea del banco cooperativo

"Lo que uno solo no logra, lo consiguen muchos." Este convencimiento de los padres creadores Friedrich Wilhelm Raiffeisen y Hermann Schulze-Delitzsch lo comparten los bancos cooperativos desde hace más de 160 años. Observe en la película cómo ha ido creciendo la idea cooperativista y por qué sigue siendo actual hoy en día.

La idea de los bancos cooperativos se inicia en el siglo 19. La época estuvo marcada por hambrunas y malas cosechas. Las necesidades sociales afectaron especialmente a los agricultores, los obreros y las pequeñas empresas. Necesitaban créditos y dependían de prestamistas privados, ya que no tenían acceso a los bancos privados municipales. Muchos se endeudaron, empobrecieron y perdieron su capacidad de sustentación económica.

Como forma de salir de la crisis existencial, Hermann Schulze-Delitzsch y Friedrich Wilhelm Raiffeisen desarrollaron casi simultáneamente la idea cooperativista de la "ayuda para la autoayuda". De forma independiente fomentaron la fundación de asociaciones de crédito o de cajas de préstamos y establecieron con ello los cimientos para la fundación de los bancos cooperativos. La fuerza de la comunidad posibilitó que cada una de las diferentes personas estuviera en disposición de ayudarse a sí mismo, siguiendo el lema "lo que no consigue uno en solitario lo consiguen muchos".

1843: en Öhringen (Wurtemberg), los ciudadanos fundaron una caja de préstamos y pusieron los cimientos de lo que hoy en día es el banco cooperativo más antiguo, el Volksbank Hohenlohe.
1849: Schulze-Delitzsch fundó la primera cooperativa, la "Schuhmacher-Assoziation" (asociación de zapateros).
1851: en Eilenburg (Sajonia) surgió una asociación crediticia que Schulze-Delitzsch utilizó como ejemplo.
1855: Schulze-Delitzsch desarrolló un código de buenas prácticas para la creación de los Volksbanken (bancos populares).
1862: en Anhausen, en el Westerwald surgió el primer banco que utilizó el modelo de Raiffeisen.
1866: Raiffeisen publicó un código de buenas prácticas para la fundación de cajas de prestamos agrícolas.

Desde entonces, el modelo del cooperativismo ha calado en todos los ámbitos de la economía. Dentro de la organización cooperativista, los bancos cooperativos constituyen con alrededor de 30 millones de clientes y unos 17 millones de miembros el mayor grupo cooperativo de Alemania. Desde siempre, los bancos cooperativos se rigen por concepciones de valores claramente definidos, acompañados de los principios de la autoayuda, la autogestión y la responsabilidad común.

El fundamento de la forma jurídica "eingetragene Genossenschaft" (eG) (cooperativa registrada) es la membresía. Los miembros de una cooperativa se asocian porque juntos pueden alcanzar más fácilmente un objetivo económico común. Como miembro de su BIB, usted participa de su banco con una o varias participaciones y puede colaborar en los procesos democráticos de decisión.

Como banco cooperativo tenemos independencia jurídica y comercial. Por nuestra cercanía con la gente y con nuestro mercado de “Instituciones eclesiásticas” estamos muy unidos a ambos. Podemos reaccionar de manera rápida y flexible a nuevas situaciones in situ, porque conocemos el mercado y podemos evaluarlo. Aproveche nuestra especial competencia para su ventaja. Mientras que otros bancos solo quieren aumentar su ganancia, nuestro objetivo es fomentar económicamente a nuestros clientes y miembros.

Los bancos Volksbank y Raiffeisenbank forman juntos una de las redes de servicios bancarios más compactas de Europa. Son institutos de financiación total y ofrecen a sus clientes un amplio abanico de servicios financieros de un único proveedor. Esto se consigue mediante una estrecha colaboración con los efectivos institutos especiales del grupo financiero cooperativista Volksbanken Raiffeisenbanken, como la Bausparkasse Schwäbisch Hall, la sociedad de fondos Union Investment así como los institutos punteros DZ BANK y WGZ BANK.